Elimine buena parte de la grasa de las costillas y raspe bien la punta del hueso con un cuchillo afilado. Mezcle el pan rallado con las semillas se sésamo y sale a su gusto. Si lo desea, puede añadir pimienta. Para poder darle un toque diferente a la receta, también se le puede añadir al pan rallado una cantidad de semillas de amapola igual a la utilizada de sésamo.
Pase las costillas por la harina, luego por el huevo batido y finalmente por el pan rallado mezclado con las semillas de sésamo, procurando que queden bien empanadas. Déjelas en la nevera durante aproximadamente 20 minutos.
Caliente a fuego medio el aceite y la mantequilla en una sartén grande. Fría las costillas, 3 minutos por cada lado, hasta que estén bien doradas y crujientes por fuera (en el interior, la carne debe mantenerse ligeramente rosada). Para servir, decore la punta de los huesos de las costillas.
Puede servirse con verduras cocidas.
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